ERNESTO “CHE” GUEVARA
LA flor que siempre es flor de Primavera,
el néctar que a los sueños da la vida,
el humus de la tierra prometida,
el triunfo de la lucha guerrillera.
El mundo galopante de ilusiones,
la rosa que ha nacido sin espinas,
tu voz la voz de América Latina,
tu luz la luz de nuestros corazones.
El tiempo descosido de futuros
recuerda en cada gesto al comandante,
romántico, bohemio, reflexivo.
LA flor que siempre es flor de Primavera,
el néctar que a los sueños da la vida,
el humus de la tierra prometida,
el triunfo de la lucha guerrillera.
El mundo galopante de ilusiones,
la rosa que ha nacido sin espinas,
tu voz la voz de América Latina,
tu luz la luz de nuestros corazones.
El tiempo descosido de futuros
recuerda en cada gesto al comandante,
romántico, bohemio, reflexivo.
La vida es un enfermo prematuro,
la muerte es la más fiel de las amantes
y Ernesto “Che” Guevara sigue vivo.
FUE EL BESO SIN AMOR DE UNA PRINCESA
FUE el beso sin Amor de una princesa
de alguna monarquía sempiterna,
de una princesa alocada y traviesa
que escondía el Amor entre las piernas.
Fue un beso sin Amor, adulterado,
dormido de pasión y sentimiento,
anémico, fugaz, interesado,
de esos que al soplar se los lleva el viento.
De besos enfermizos, de hojalata,
se pintan tantas bocas caprichosas
llenamos la ilusión con tantas cosas
que un beso siendo un beso a veces mata.
Ayer en los jardines de palacio
un príncipe se convirtió en batracio.
SI TU ESTUVIERAS AQUÍ
SI tu estuvieras aquí
el mundo giraría más deprisa que mi soledad
y el Amor no sería un pájaro sin alas
al que tengo que enseñar a volar todos los días.
Si tu estuvieras aquí
mis sueños que son tuyos dormirían a tu lado
y el deseo no sería una ventana enladrillada
con vistas a los besos que te debo.
Mis futuros no serían pasados imperfectos
y mis labios, adúlteros de ausencias,
aprenderían a decir “te necesito”.
De no haberte conocido,
¿qué parte de mi alma se habría quedado estéril,
estéril para siempre?.
Y YO TAN SOLO
Sincero como los niños y los borrachos,
travieso como la musa de los artistas,
inútil como la flor del coleccionista,
extraño como los besos en los despachos.
Absurdo como las balas y las banderas,
insulso como los labios hechos de mármol,
herido como las hojas que caen del árbol,
errante como el aroma de Primavera.
Distante como la voz de los dictadores,
perdido como un “te quiero” en un telegrama,
confuso como la muerte frente al espejo.
Inquieto como un alérgico entre las flores,
vacío como un diario sin crucigrama...
Y yo siempre tan solo y tu siempre tan lejos.
EL HOMBRE Y LA VIDA
EL Hombre se enamora de la Vida
creyendo que le será fiel para siempre.
Es por eso que el Hombre vive,
se hipoteca,
hace planes,
sueña y se ilusiona.
Es por eso que el Hombre
invierte en futuros imperfectos,
en futuros imprecisos,
en futuros razonables.
Viaja por el mundo
con la maleta sin hacer
porque se cree que la Vida
es ese tren de cercanías
que espera siempre en la estación.
Pero un día,
cuando cree que el mundo es suyo
y que la Vida come de su mano,
la Muerte,
que es paciente y está sola,
se lo lleva a vivir siempre con ella.
Y deja el mundo a medio hacer,
las luces encendidas,
los sueños sin cumplir,
el video programado,
la pasión en los felpudos,
el Amor recalentado,
las puertas del dolor sin cerradura,
la ropa sin doblar en los armarios,
el tiempo dislocado de futuros,
la carne congelada en la nevera,
la Vida agonizante de recuerdos.
Y deja corazones destrozados,
inconclusos,
malheridos,
corazones desvirgados por la angustia.
Y deja corazones mutilados,
solitarios,
indecisos,
corazones infectados para siempre
por el lento caminar de la tristeza.
Corazones como el mío.
Y es que a mis años
y después de ver como la Muerte
se llevaba a mi familia,
se llevaba a mis amigos,
sé que cuando doblan las campanas
están doblando por mí
y que la Muerte,
puntual y seductora,
es la más fiel de mis amantes.
.
Amado Storni
No hay comentarios.:
Publicar un comentario